Las spanakopitas son un pastelillo típico de Grecia, súper crujiente y relleno de espinacas. La receta original se elabora con un relleno a base de espinacas y queso feta, pero yo he hecho mi propia versión.
Por lo general, suelo respetar las recetas típica de determinadas regiones y países porque me gusta ajustarme al original, pero este caso ha sido una excepción. Como a mi madre y a mi novio no les sienta demasiado bien la lactosa, me he decantado por hacer una adaptación libre de lactosa, que ellos también tienen derecho a comer rico, oigan.
El resultado ha sido altamente satisfactorio: la crema de espinacas hecha con leche sin lactosa, maicena y nueces queda con una textura súper suave y con el crujiente de la masa filo es una maravilla.
La de las spanakopitas una receta rápida y fácil, no ensucia demasiado porque va al horno y es perfecta para servir como entrante en una comida de fin de semana y, además, podéis hacer dos rellenos, uno tradicional con feta y otro para intolerantes a la lactosa con mi receta.
Y encima, con los retales que me han sobrado me he preparado unas falsas spanakopitas de crema de cacao, osease un pegote de crema de chocolate bien envuelto en trozos de masa filo. Y ale, ya tenemos postre.